Xenien (del griego Xenion, regalo del visitante) fue el nombre que el poeta romano Marcial (siglo I) le dio a la colección de sus poemas con las que acompañaba sus regalos.
Posteriormente, Goethe nombró a una colección de dísticos, que había escrito junto con Schiller, los Xenien.
La contribución de Goethe a los Xenien puede ser descartada sin mucho preámbulo.
Los Xenien sufrieron la indiferencia y animosidad de la crítica contemporánea.
Los Xenien tuvieron éxito en responderles a los críticos, pero las obras maestras que les siguieron fueron mucho más efectivas y exitosas en combatir la mediocridad que prevalecía por esos años.