Yacimiento arqueológico Barrio Andalusí

El empresario Luis Batlles Rodríguez consiguió en 1964 licencia del Ayuntamiento de Almería para la conversión de este enclave, conocido en aquel entonces como Parque Ramón Castilla Pérez, en un pintoresco hotel con 35 alojamientos independientes y 80 camas, piscina, terraza para celebraciones, un tablao flamenco y un restaurante.

Las obras,[3]​ a cargo del arquitecto Fernando Cassinello, duraron unos años y fueron visitadas en dos ocasiones por el entonces ministro de Información y Turismo Manuel Fraga, quien consideró convertirlo en Parador Nacional, aunque finalmente el proyectó no fructiferó y Batlles tuvo que hacerse cargo de todo el presupuesto.

[4]​ Finalmente, en 1967 este complejo turístico se encontraba completamente operativo, y además estuvo muy relacionado con algunas figuras internacionales que rodaron en Almería, como Sean Connery, Charlton Heston, Yul Brynner, Brigitte Bardó o Stephen Boyd.

La propiedad fue subarrendada a Ulpiano Sánchez en 1974, y más tarde a Agustín Taruelo, quienes se disputaron la gestión y cuyo contrato terminó en el Juzgado de Guardia, cerrando finalmente el Mesón Gitano sus puertas en 1978.

Asimismo, el recinto arqueológico fue musealizado con más de un centenar de piezas, como jarras, tinajas, marmitas, anafres e incluso agujas para coser, que han sido encontradas durante las excavaciones.