El pequeño lago Botnstjörn alberga una variedad de patos y otras aves acuáticas.
Hace 2000 años, el río se desplazó unos 2 km al este, dejando descubierta la garganta de Ásbyrgi.
Ásbyrgi también es conocida como una capital élfica, debido a la creencia general y profundamente arraigada en los elfos en la mitología islandesa, llamados huldufólk ("gente oculta" o "personas invisibles").
Incluso hay un curioso letrero que avisa de un gran centro cultural y económico élfico.
[3] Por la lejanía del lugar, no hay mucha infraestructura en comparación a otras partes, hay varios senderos para caminar alrededor del área, y pequeños carteles informativos sobre las especies de plantas que habitan el lugar.