1-Metilciclopropeno

[3]​[4]​ La exposición durante varias horas al 1-metilciclopropeno, en concentraciones variables según la especie (pero que pueden ser tan bajas como 0,2 µL L−1, por ejemplo, en peras), vuelve a ciertas frutas y hortalizas insensibles al etileno por períodos de tiempo considerables (días a semanas).

[5]​ El término «metilciclopropeno» puede hacer referencia a uno de dos isómeros, el 1-metilciclopropeno tratado en este artículo, o el 3-metilciclopropeno.

Entre los frutos climatéricos, el kiwi ofrece una respuesta mucho más notoria (marcado ablandamiento) a la presencia de etileno en el ambiente que los duraznos.

Por tratarse de un metal pesado, el uso del ion Ag+ es incompatible con alimentos destinados a consumo y, en frutos, se utiliza únicamente en investigación científica.

[8]​[9]​ Además, se han encontrado respuestas de retardo en la maduración en otros frutos, como kiwi, palta, banana, etc.

Por otra parte, en muchos productos se pueden combinar los efectos de las distintas tecnologías, como así también la aplicación.

En referencia a los efectos del 1-MCP, resulta conveniente efectuar algunos comentarios generales, sobre la base de dos revisiones científicas.

El advenimiento del 1-MCP como herramienta tecnológica tuvo un enorme impacto a nivel comercial.

Sin embargo, no todas las especies de frutos responden favorablemente a la acción del 1-MCP.

Los claveles son flores muy sensibles a la presencia de etileno en el ambiente. Responden muy bien a la aplicación de 1-metilciclopropeno.
La calidad de las flores de diversas plantas ornamentales, entre ellas el geranio , mejora con la aplicación de 1-metilciclopropeno
El uso del 1-metilciclopropeno como tecnología complementaria del frío se justifica plenamente en frutos como las manzanas que presentan una buena respuesta al producto y cuyo consumo se busca diferir más marcadamente en el tiempo. También se utiliza en frutos que se presentarán de forma diferenciada en los mercados.