Adolfo Loning

"Fui el primer alemán que se alistó", dice.

Su ayudante alemán, un desertor de la Legión Extranjera francesa, lo abandonó allí, robándole toda su impedimenta que consistía en cuatro camisas, unos calcetines y dos pantalones de verano, para incorporarse nuevamente a la legión citada.

En febrero de 1837, estando Loning en Zornoza, al presentarse un importante grupo de desertores de la citada legión para pertenecer al bando carlista, comprobó asombrado que su antiguo ayudante se encontraba entre ellos.

Estas continuas deserciones de los legionarios se debían a que los carlistas premiaban a los desertores con 10 pesetas si se presentaban armados y con 5 si venían sin armas; al que traía su caballo recibía un suplemento de 50 pesetas.

Vuelto al acabar la guerra a Alemania, publicó sus obras reseñadas: en 1843 sobre los fueros de Navarra y de las Provincias Vascas y en 1844 sobre su participación en la Primera Guerra Carlista.

Portada. A. Lohning. Das spanische Volk.