Cuando su padre, un hombre de negocios moderadamente acomodado, se arruinó, la familia fue apoyada por su madre, que era muchos años más joven que su padre, se formó como fotógrafa y trabajó como traductora para mantener a la familia.
Debido a la estricta tolerancia religiosa de su escuela, se hizo popular entre los no luteranos como los judíos.
Su escuela fue exitosa, recibió apoyo del gobierno y el derecho a emitir títulos profesionales.
Su madre había sido la primera secretaria del sindicato Fredrika Bremer y, por lo tanto, entró en contacto temprano con el tema de la mujer.
Whitlock se opuso a esto e hizo que el tema fuera voluntario en su escuela.
En 1902, se presentaron al Parlamento sueco dos mociones relativas a la reforma del sufragio femenino.
Tenía muy buena relación con su vicepresidenta, Signe Bergman, respetada por su capacidad, aunque personalmente liberal, para mantener la neutralidad política de la asociación.
En 1905, fundó Kvinnornas Andelsförening Svenska Hem, una asociación cooperativa que intentaba garantizar una mejor calidad de los alimentos.