[2] Unos veinte millones de esclavos africanos fueron transportados por estos barcos.
[5] Los siglos XVII y XVIII marcaron el máximo nivel de ese tráfico.
[6] Cientos de esclavos (un barco medio, como el Henrietta Marie, llevaba unos doscientos) se transportaban encadenados a literas donde se mantenían en posición horizontal, sin espacio para moverse.
[7] Los barcos negreros pasaron a ser considerados piratas y perseguidos por Gran Bretaña a partir de 1807 (Ley de trata de esclavos), que encomendó a la Real Armada a perseguir barcos negreros dondequiera que fuesen hallados, y que resultó en la captura de mil seiscientos barcos negreros y consecuente liberación de ciento sesenta mil almas por los británicos durante la cincuentena subsiguiente.
En dicha época los barcos negreros se hicieron más pequeños y rápidos (blockade runner —literalmente "el que escapa de los bloqueos"—),[11] para eludir mejor la persecución.