Batalla de Seonghwan

Para ello, un destacamento de 4.000 hombres del Primer Ejército Japonés, bajo el mando del Mayor General Ōshima Yoshimasa, marchó al sur desde Seúl hacia la ciudad portuaria de Asan.

Las fuerzas chinas acantonadas en Seonghwan contaban con unos efectivos de unos 3.880 hombres, al mando del General Nie Shicheng, y ante la inminente llegada de fuerzas japonesas, fortificaron sus posiciones con trincheras, búnkeres y otras fortificaciones terrestres, además de inundar los arrozales cercanos.

Los defensores, tras intensos combates, fueron incapaces de mantener posiciones en Seonghwan, y se retiraron hacia Asan, a unos 16 kilómetros a suroeste, dejando atrás un número considerable de armas y equipo.

[1]​ Las unidades japoneses persiguieron a los chinos hasta Asan, pero la contundente derrota en Seonghwan tuvo un impacto devastador en la moral de los soldados chinos, y los japoneses tomaron Asan sin apenas resistencia a las 15:00 horas del 29 de julio.

Tras esta batalla, se declaró formalmente la guerra entre Japón y China.