Batalla del Portazgo

Tras dicha batalla y ante la imposibilidad de atravesar las líneas defensivas en torno al caño de Sancti Petri, los galos hubieron de replegarse y se vieron obligados a establecer un cerco a la plaza, dando inicio al Sitio de Cádiz.

La batería fue instalada poco después del combate, y se convirtió en un foco vital de choques entre ambos bandos.

Su guarnición la formaban durante el día 136 combatientes, de los cuales existían: 1 capitán, 2 subalternos, 5 sargentos, 1 tambor, 13 cabos y 117 soldados.

Durante la noche la batería era reforzada por 139 combatientes de los que existían: 1 capitán, 3 subalternos, 8 sargentos, 1 tambor, 14 cabos y 116 soldados.

Es destacable, que las primeras resistencias a los envites franceses, se hicieron en posiciones defensivas realizadas con maderas de casas ruinosas de la Isla de León; llevándose a cabo con gran precipitación.