Durante la guerra civil española vio la represión del bando nacional y marcó su vida para siempre.
A los 16 años empezó a trabajar en la minería, con una influencia anarcosindicalista y ejerció como enlace de la guerrilla del "maquis" para la Agrupación Guerrillera León-Galicia, liderada por César Ríos, entre 1942 y 1949.
De esta forma, se convirtió en dirigente comunista en la clandestinidad para León y Galicia.
Desde finales de los años 50, la política sindical del PCE marcaba el intrusismo en los sindicatos Verticales.
Uno de esos representantes era Benjamín Rubio, conformándose una Comisión Obrera permanente y cuya extensión será el nacimiento del sindicato Comisiones Obreras (CCOO), de la que se convirtió en un importante dirigente.