Ridley Scott ejerció como productor ejecutivo y el reparto cuenta con Ryan Gosling, Harrison Ford, Ana de Armas, Sylvia Hoeks, Robin Wright, Jared Leto, Dave Bautista, Carla Juri, Mackenzie Davis, Barkhad Abdi, David Dastmalchian, Hiam Abbass y Lennie James.
Para evitar una posible guerra entre humanos y replicantes, K se encarga secretamente de encontrar al niño y destruir toda evidencia relacionada con él, llevándolo a descubrir que este está vinculado al desaparecido blade runner Rick Deckard.
La investigación de K acerca del Movimiento de Libertad Replicante lo conduce a una granja, donde «retira» al replicante clandestino Sapper Morton (Dave Bautista) y encuentra una caja enterrada con lo que parecen ser restos óseos en su interior.
K, perturbado por sus órdenes, visita la sede del fabricante de replicantes Niander Wallace (Jared Leto), un millonario excéntrico que identifica al cuerpo como el de Rachael (Sean Young), una replicante experimental a la que le fueron implantados recuerdos humanos por su creador, el Dr. Eldon Tyrell (Joe Turkel).
Wallace espera utilizar al niño para diseñar una reproducción replicante y expandir sus operaciones fuera del mundo.
Tras lograr rastrear la localización de K, Luv y sus hombres llegan para secuestrar a Deckard.
Deckard se niega a cooperar con Wallace, incluso cuando este último le muestra una recreación replicante de Rachael.
[41][42][43] Al igual que Blade Runner, volvió a hacer uso destacado del product placement,[44] mostrando los logos de Atari (declarada en bancarrota en 2013), Coca-Cola, Diageo, Johnnie Walker, Pan Am (quebrada en 1991), Peugeot o Sony.
[35] A este respecto, se han reseñado paralelismos temáticos y artísticos con el filme soviético Stalker (1979) de Andréi Tarkovski,[48] cineasta al que los miembros del equipo le atribuyen gran inspiración.
[75] Y, en una entrevista con Collider, su director Denis Villeneuve confirmó que la secuela no tendría voz en off.
[50] Al respecto del estilo visual, el director Denis Villeneuve ha manifestado que decidió que «así como la primera película tenía una atmósfera de lluvia constante, en esta sería más fría», aunque añade: «Intenté encontrar un equilibrio con explosiones de color que expresaran ciertas emociones y temas [...] el color amarillo es muy importante en la película y está relacionado con diferentes aspectos de la historia».
Sin embargo, dada la magnitud de la tarea, Benjamin Wallfisch y Hans Zimmer se han unido al equipo para ayudar a Jóhann.
Tenemos sonidos atmosféricos impresionantes de Jóhann, pero necesitaba otras cosas, y Hans nos ha ayudado».
[102] Posteriormente se supo que Jóhannsson dejó la música de Blade Runner 2049 porque Villeneuve quería «algo más cercano a Vangelis».
Además, la banda sonora incluye una versión del tema «Tears in Rain» del primer film bajo el título «Tears in the Rain», varias canciones clásicas cantadas por Frank Sinatra y Elvis Presley, y el tema inédito «Almost Human», interpretado por Lauren Daigle y que había aparecido en los créditos finales de Blade Runner Black Out 2022 .
[118] Posteriormente Alcon Entertainment se asoció con la compañía tecnológica Oculus VR para distribuir la película en exclusividad en formato de realidad virtual y presentarlo simultáneamente a su estreno.
[121] Tras la presentación del film, se supo que el título iba a ser inicialmente Blade Runner: Androids Dream.
[151] Las primeras críticas de Blade Runner 2049 previas a su estreno oficial coincidieron en que era «una obra maestra».
[154] Metacritic asignó a la película una puntuación media ponderada de 81 sobre 100, basada en 54 críticas, indicando «aclamación universal».
Blade Runner 2049 es un narcótico espectáculo de una misteriosa e inmisericorde inmensidad, a su vez satírica, trágica y romántica».
La encontró, sin embargo, en última instancia desigual al original, describiendo Blade Runner 2049 como «una “mejora” más dócil, menos rebelde».
[163] Christopher Orr escribiendo para la revista Atlantic encontró que la secuela era una continuación fiel y valiosa de la película original, afirmando: «Esto es en parte porque, al igual que su predecesora, Blade Runner 2049 es un artefacto decididamente interesante, y no principalmente una película de actores.
[167] Escribiendo para The Guardian, Anna Smith expresó preocupaciones similares sobre sexismo, afirmando que «las imágenes sexualizadas de las mujeres dominan los impresionantes paisajes urbanos futuristas» y señalando que el elenco de replicantes, hologramas desnudos, estatuas gigantes y sexbots parecen atender exclusivamente a los hombres heterosexuales.
Los personajes pueden atravesar las paredes, pero en ningún caso es incierto dónde están esos muros en relación con el caos.
Y es ahí, en el contraste, en la más entusiasta borrachera alucinatoria, donde la película de Villenueuve crece hasta la simple hipnosis.
[177] Jesús Jiménez para RTVE, desde una crítica más neutral, aludió a que «Villeneuve ha superado con nota el reto de continuar ese mito y ha aportado muchas cosas al universo de Blade Runner, pero no ha conseguido esa obra maestra con la que soñábamos.
[178] Oti Rodríguez Marchante para ABC le otorgó cuatro estrellas sobre cinco, terminando con: «Es una magnífica película, pero de este año y, a lo sumo, del próximo».
La autora documentó el desarrollo del film durante dos años, obteniendo acceso al proceso creativo.
[253] En 2020 se lanzó Blade Runner 2049: Nexus Protocol, un juego de naipes oficial basado en la película.
Creado por WizKids, en el mismo los jugadores compiten contra Deckard y entre sí para cazar a un hipotético último replicante.