Blas Mañes Palomar

Se desconocen los datos referentes a la infancia del futuro sacerdote, suponiendo que estudiaría las primeras letras en la escuela de su localidad y posteriormente ingresaría en el seminario diocesano de Segorbe (Castellón).

[2]​ Durante su traslado a Torrebaja, los que lo conducían pasaron por la zona denominada “Casas de Guerrero”, donde el grupo tuvo un encuentro con la vecina Vicenta Valentín Pastor (Ademuz, 1906-Ibíd., 1983).

Sí, entre otros fue el mismo presidente del Comité, un tal José Pérez Luz (…), que se lo bajó.

Una vez allí (en Ademuz), donde el cerrado de don Jesús (Eced Carreras) se lo entregaron a la familia.

Yo no sé lo que sucedería, si se hartaría de estar en casa y saldría o irían a buscarle; el caso es que lo volvieron a coger y entonces lo encerraron en el calabozo (de Ademuz)".

No, no sé si serían los mismos que lo habían traído o fueron otros; tampoco sé si eran del pueblo… Pero contaba mi padre que al sacarlo había por allí tres mujeres, y al pasar los hombres con don Blas preguntaron: .

Enseguida se supo que era don Blas Mañes Palomar, el cura párroco de Ademuz.

Lo enterraron allí mismo, al borde de la calzada, donde estuvo hasta que terminó la guerra.

Por eso después de la guerra el Ayuntamiento puso una placa con su nombre, dedicándole la plaza del Rabal, donde la iglesia".