En la mitología griega, Calcíope (Χαλκιόπη, Khalkiópē) es una princesa de la Cólquida (actual Georgia), hija del rey Eetes, quien entregó de buena gana a su hija como esposa para Frixo.
Los campesinos, temiendo una gran hambruna, consultaron al oráculo más cercano.
El cordero consiguió, pues, llevar únicamente a Frixo hasta la Cólquida, donde le recibió el rey Eetes con grandes honores y le dio a su hija Calcíope como esposa.
Los hijos de Calcíope y Frixo se propusieron viajar hasta Grecia y reclamar el trono de Orcómeno, que había pertenecido a su abuelo Atamante.
Aprovechando esta circunstancia, Jasón les explicó que viajaba a la Cólquida para llevar con honor el alma de Frixo hasta Grecia y, con él, el vellocino de oro del carnero que le había salvado la vida, y les pidió ayuda para convencer al rey Eetes de que se lo entregara voluntariamente.