Calle de los Reyes

Habla Mesonero Romanos en sus Paseos histórico-anecdóticos por el viejo Madrid del arroyo residual o alcantarilla que corría por el fondo del barranco que en su origen fue esta calle, y lo explica así:[1]​

[2]​ Cronistas veteranos y fiables como Fernández de los Ríos y Pedro de Répide advierten que Madrid tuvo hasta tres calles con este nombre: En cuanto al origen del nombre, una de las tópicas y peregrinas leyendas madrileñas cuenta que reinando Fernando VI, se eligió un solar de esta calle para labrar la colección de estatuas de monarcas españoles que luego se llevaron a decorar la balaustrada del Palacio Real de Madrid (y que 'por su mucho peso' se quitaron de allí para repartirse por la geografía madrileña y no madrileña).

La propuesta hace aguas por ser el nombre de la calle -y como tal figurar en algunos mapas de la Villa- más antiguo que las referidas obras del nuevo palacio real.

Répide propone como origen 'más verosímil' el que aquí estuviera el palacio del conde de la Alcudia, cuya fachada decoraban unas imágenes de los reyes del Antiguo Testamento.

[4]​ Además del referido palacio, a lo largo de su breve recorrido tienen fachada la antigua Universidad Central, el Instituto Cardenal Cisneros y algunos vetustos palacetes como el de los duques de Pastrana, reconvertido en residencia religiosa.

La calle de los Reyes en el callejero artístico del viejo Madrid.
Vista de la calle de los Reyes. Al fondo, el Instituto Cardenal Cisneros .