Can Canyadó

[1]​ Declarado monumento histórico-artístico en 1974, está catalogado como Bien de Interés Cultural del patrimonio español con el código RI-51-0003962.

Como muchas de las masías catalanas, la finca estaba bajo un contrato de aparcería; esto es, no eran los propietarios quienes la cultivaban, sino una familia que arrendaba la casa y las tierras.

[3]​ Can Canyadó funcionó como finca agrícola hasta mediados de siglo XX.

La última familia de «masoveros» fueron los hermanos Camps Grau, quienes se instalaron en 1930.

El 1956 fueron expulsados por los entonces propietarios, los Ventós y Mir, quienes habían proyectado derribar la masía para construir bloques de viviendas, iniciativa que no prosperó.