[2] Carl comenzó trabajando para su padre, aunque sus desavenencias le llevaron a crear su propia marca de cerveza en 1882.
Más tarde, las dos empresas Carlsberg se unieron y desde 1906 Carl fue el líder de la marca.
Carl Jacobsen no mostró interés en la política como su padre, a pesar de que ambos coincidían en su entusiasmo por la cultura y el arte clásico griego.
Contrató a grandes arquitectos daneses del momento, principalmente Vilhelm Dahlerup, y construyó edificios con gran detalle, tal y como se aprecia en la Chimenea Serpenteante.
Aunque a veces se preocupaba por sus intereses culturales, Carl era un empresario inteligente y visionario que inició la transición de Carlsberg, desde una cervecera local de Copenhague, hasta la agrupación multinacional que es hoy.