Caso Friburgo

La comisión independiente encargada de investigar el caso concluyó en su informe que, durante el Tour de Francia 2006 (en concreto, tras la primera etapa, el 2 de junio), los ciclistas del T-Mobile Andreas Klöden, Matthias Kessler y Patrik Sinkewitz viajaron en un coche (conducido por la novia de Sinkewitz) a la Clínica Universitaria de Friburgo.

Allí, a su llegada a las seis de la tarde, fueron recibidos por el doctor Schmid, quien les condujo a un cuarto oscuro donde permanecieron 45 minutos recibiendo autotransfusiones sanguíneas, para volver después al hotel de su equipo en la ronda gala.

La comisión indicó que no podía afirmar que todos los ciclistas del T-Mobile en el Tour 2006 acudieran aquella tarde del 2 de junio a Friburgo, al no poder confirmar la visita a la clínica de un segundo grupo de corredores.

[1]​ El 31 de octubre de 2009 se conoció que Klöden había llegado a un acuerdo con la Fiscalía de Bonn, según el cual pagaría una multa de 25.000 euros a cambio de que se pararan las investigaciones existentes contra él por un posible fraude deportivo.

Según la legislación alemana dicho acuerdo no suponía una admisión de culpa por parte de Klöden.