La residencia se construyó con planta en forma de L y posee dos torres.
Ella descubre el jardín francés ordenado por su hijo, Charles, y realizado según un diseño de Le Nôtre.
Frente al orden del jardín francés, Madame de Sévigné preferirá el desorden y el "salvajismo" de su parque que supervisa ella misma, con la ayuda del jardinero Pilois, en la plantación y mantenimiento.
[2] El conjunto está bordeado por un parque poblado de árboles y la Marquesa le puso nombre a todas sus avenidas.
En esta residencia escribió muchas de las famosas cartas dirigidas a su hija.