La I+D es muy importante en las universidades del Reino Unido,[4] muchas de las cuales han creado parques científicos para facilitar la producción y cooperación con la industria.
[7] En ciencias de la naturaleza, las teorías propuestas por Isaac Newton (gravitación universal, Principia, 1687) y Charles Darwin (evolución, The descent of man, 1871, The origin of species, 1859 -simultáneamente a las investigaciones del también británico Alfred Russel Wallace-) supusieron verdaderos cambios de paradigma en física y biología respectivamente.
Simultánamente a las revoluciones científica e industrial, los pensadores británicos, caracterizados por el empirismo, desarrollaron las ciencias sociales modernas, tanto en la historia de las ideas políticas (Thomas Hobbes -Leviathan, 1651, John Locke -Two treatises of government, 1689-, Thomas Paine, Edmund Burke, William Godwin, Mary Wollstonecraft, Jeremy Bentham, John Stuart Mill) como en la de las económicas (Adam Smith, The wealth of nations, 1776, Thomas Malthus -An Essay on the Principle of Population, 1798, David Ricardo, On the Principles of Political Economy and Taxation,[14] 1817, William Stanley Jevons, Alfred Marshall) o en la antropología (James George Frazer, Bronisław Malinowski).
Algunas destacadas figuras realizaron ambiciosos esfuerzos intelectuales por dar una respuesta teórica definitiva en sus campos, como David Hume (A Treatise of Human Nature,[16] 1739 -pretendía fundar una totalizadora "ciencia del hombre" examinando las bases psicológicas de la naturaleza humana-) o Bertrand Russell y Alfred North Whitehead (Principia mathematica, 1910-1913 -pretendían establecer las bases de un pensamiento lógico-matemático que entendían como completo e irrebatible-).
George Edward Moore desarrolló el realismo filosófico, y A. J. Ayer el positivismo lógico del Círculo de Viena.
El desarrollo de la ciudad requiere instalaciones cada vez más grandes, donde las funciones públicas adquieren un rol preponderante: se crean nuevas fábricas, depósitos y puertos.
Estrechamente vinculado a ella, David Attenborough ha tenido un destacado papel en la divulgación científica, como también el polemista pro-evolucionismo Richard Dawkins.