Clitunno (mitología)

Clitunno / Clitunnus en latín original, también llamado Clitumno, es el dios o numen fluvial romano del río del mismo nombre en la Umbría, hijo de los dioses marinos Océano y Tetis.

Aunque su corriente es normalmente lenta, está sometido como muchos otros ríos en la llanura umbra oriental a repentinos desbordamientos: sólo fue dominado completamente en el siglo XIX, y está contenido mediante diques en gran parte.

Conocido ya en la antigüedad, el numen tutelar del río era el dios Júpiter Clitunno.

Lo cita Virgilio en el libro II de sus Geórgicas, que atribuye a sus aguas poderes milagrosos (los bueyes destinados al sacrificio se volvían blancos si se bañaban en sus aguas), hecho que también recordaron Propercio, Silio Itálico, Estacio, Juvenal y Claudiano,[1]​ mientras que el paisaje idílico que rodeaba al complejo religioso lo describe con detalle en una larga carta Plinio el Joven (VIII, 8).

Sus fuentes fueron cantadas por Byron en el libro IV de su Childe Harold y por el poeta italiano Giosuè Carducci en su "Oda a las fuentes del Clitumno".

Templo de Clitunnus en Trevi