Colina (química)

La colina es la molécula precursora de la acetilcolina, un neurotransmisor que está involucrado en muchas funciones, entre las cuales se incluye la memoria y el control del músculo.

El déficit de colina, raro en humanos, causa esteatohepatitis no alcohólica y daño muscular.

En 1998 la colina fue clasificada como un nutriente esencial por el “Food and Nutrition Board” (Comité sobre alimentación y nutrición) del “Institute of Medicine” (EUA).

La colina es una amina cuaternaria saturada cuya fórmula química es (CH3)3N+CH2CH2OHX-, donde X− es un contraión como el cloruro, hidroxilo o tartrato.

El hidróxido de colina no es completamente estable, y se degrada lentamente dando lugar a trimetilamina.

Una dieta que contenga alimentos ricos en colina puede reducir la gravedad de la deficiencia.

Una dieta baja en colina puede también causar infertilidad, crecimiento deteriorado, anormalidades en los huesos e hipertensión.

El olor puede darse incluso teniendo una dieta normal, con niveles de colina no muy altos.

A las personas con trimetilaminuria se les aconseja restringir el consumo de alimentos ricos en colina, ya que esto puede ayudar a reducir el olor corporal[9]​ Los vegetarianos (y vegetarianos estrictos), atletas resistentes y los bebedores de mucho alcohol pueden tener riesgo de deficiencia en colina.

[2]​[12]​ El Dr. Steven Zeisel, investigador en colina, dijo que: “Un análisis reciente de NHANES 2003-2004 reveló que para los niños más mayores, hombres, mujeres y embarazadas, el consumo de colina era bastante inferior al recomendado.

Un 10% o menos consumía habitualmente colina en un nivel igual o superior al recomendado.”[2]​ El consumo adecuado de colina en las mujeres adultas es de 425 mg por día; aumentando a 450 mg para las embarazadas y las que están amamantando.

[28]​ La deficiencia de colina puede provocar enfermedades hepáticas, arteriosclerosis y posiblemente desórdenes neurológicos.

Gracias a un estudio se descubrió que una dieta alta en colina poco antes y después de la concepción estaba asociado a un menor riesgo de defectos en el tubo neural.

Sin embargo, no había correlación entre la depresión y los niveles de colina en este estudio.

Durante el embarazo la colina se acumula en la placenta, mayoritariamente en forma de acetilcolina.

En el líquido amniótico la concentración de colina puede ser diez veces superior al nivel que se encuentra en la sangre materna.

Esta alta concentración de colina permite que esté disponible para los tejidos del feto.

[38]​[39]​[40]​ Además de estas funciones, la colina tiene mucho que ver en la formación y desarrollo del cerebro.

Además, se necesita colina para la producción del neurotransmisor acetilcolina, el cual puede influir en la estructura y organización de determinadas regiones del cerebro, en la neurogénesis, mielinización y formación de la sinapsis.

[47]​[48]​ La concentración también es muy importante para que pueda llegar colina al cerebro y así asegurar una correcta formación de este órgano.

La colina se almacena unida a la membrana en forma de fosfatidilcolina, y podrá ser utilizada por ejemplo, para la síntesis del neurotransmisor acetilcolinesterasa.

Sin embargo, el mecanismo que hay detrás todavía no se conoce exactamente.

El epitelio mamario es el lugar donde se acumulan las materias primas que acabarán formando la leche, incluyendo la colina.

Este incremento en el CI podría tener un impacto relativo a nivel individual.

Sin embargo, este posible impacto también se debería considerar a nivel poblacional.

[cita requerida] Un estudio reciente (noviembre de 2010) realizado por Leslie M. Fischer, Kerry Ann da Costa, Lester Kwock, Joseph Galanko y Steven Zeisel consistió en hacer una prueba a mujeres postmenopáusicas con niveles bajos de estrógenos y ver si eran más susceptibles de una disfunción en algún órgano si no se les sometía a una dieta rica en colina.

Metabolismo de la colina. ( Choline en el gráfico).