[3] La cometa fue el primer medio aéreo de la historia militar en servir como arma,[4] siglos antes de los globos incendiarios, que no se usarían hasta finales del siglo xviii.
En ella se relata que en 647, el general coreano Kim Yushin impulsó el uso de cometas envueltas en llamas contra los rebeldes en el reino de Silla, que servían tanto para causar incendios como, principalmente, para asustar a los insurrectos.
[6] Aunque serían los chinos —inventores de la cometa tres milenios antes— los que en el siglo xii, durante la Dinastía Song, serían los primeros en usar cometas como táctica bélica.
[7][8] Es cuando se desarrolla el conocido como Cuervo ardiente, una cometa tradicional provista de pólvora, un detonador y una vara de incienso, encendida en el momento del lanzamiento, que servía como mecha lenta.
Una vez incendiadas las cuatro puntas de la improvisada cometa (debe hacerse más o menos al mismo tiempo), esta empieza a elevarse casi de inmediato, hasta que en cierto punto se desintegra en el aire.