Fue construido durante el reinado nazarí, con anterioridad a 1336, y su nombre original era Al-Funduq al-Gidida, o Alhóndiga Nueva.
En líneas generales, como describe Leopoldo Torres Balbás,[1] este edificio responde a un modelo oriental, pero la decoración y los detalles son netamente granadinos.
Su ascendencia puede seguirse desde las ágoras griegas, a través luego de los horreas romanos, hasta los tiempos islámicos.
La portada monumental procede del iwan oriental, cuyos orígenes han sido muy discutidos, y que se encuentra ya en los palacios sasánidas.
La transmisión a Occidente se haría por intermedio del Egipto, en donde el pórtico de entrada abierto por un gran arco, abovedado con mocárabes, y en cuyo fondo está la puerta adintelada de acceso al edificio, y una ventana gemela encima, es disposición arquitectónica muy difundida.