Criterios diagnósticos de investigación

La versión final de los RDC se publicó en 1978,[6]​ en un artículo en la revista académica Archives of General Psychiatry titulado «Research Diagnostic Criteria: Rationale and Reliability».

En este sentido, resaltaban la falta de «criterios [diagnósticos] explícitos» en las primeras dos ediciones del DSM.

[12]​ En este sentido, los autores de los RDC también desarrollaron una nueva entrevista estructurada —«Schedules for Affective Disorders and Schizophrenia (SADS)» o «Cédula para Trastornos Afectivos y Esquizofrenia»—.

[3]​[13]​ En algunas categorías se añadían criterios para considerarlas probables o definidas, y todas requerían que las manifestaciones no estuvieran explicadas por condiciones físicas.

[8]​ En este sentido, según de León (2014), la tercera edición del DSM pareció centrarse en la «democracia diagnóstica» —«acuerdo entre los expertos»— y la «fiabilidad entre observadores».