La divisa del cordón de san Francisco fue un emblema o divisa real adoptada por el monarca Enrique III de Castilla como símbolo identitario personal durante su reinado (1393-1406).
También fue utilizado por su hijo Juan II de Castilla, así como de su nieto Enrique IV, y parece que estuvo relacionada con Isabel la Católica.
[1] Su creación estuvo motivada por la devoción que el rey profesaba a san Francisco, con quien compartía fecha de nacimiento.
Al contrario de lo que solía ocurrir con las divisas, no creó un collar específico, sino que fue el distintivo fue el propio cordón a modo de collar.
Ejercieron este oficio Juan Álvarez Osorio (m. 1417),[1] conde de Colle y señor de Villalobos y Castroverde,[2] con un sueldo que duplicaba al que tenía el alférez mayor de la divisa de la Banda,[1] y a su muerte sucedió en el oficio su hijo Pedro Álvarez Osorio (m. 1461), i conde de Trastámara.