En el ámbito de la psiquiatría,[1] se denominaba dysaesthesia aethiopica a una supuesta enfermedad mental descrita por el médico estadounidense Samuel A. Cartwright en 1851, quien propuso una teoría sobre la causa de la pereza entre los esclavos.
"[5][6] Cartwright mencionaba que la existencia de la dysaesthesia aethiopica quedaba "claramente establecida por el testimonio directo y positivo", pero otros doctores no la habían detectado porque "no han puesto atención en los males que afectan a la raza negra.
"[7] Cartwright consideraba que la dysaesthesia aethiopica era "fácilmente curable, si se trata de acuerdo a principios sicológicos serios.
Por supuesto, uno se pregunta si los azotes no eran la causa de las 'lesiones' que confirmaban el diagnóstico.
"[9] Según Cartwright, luego que se llevara a cabo el "tratamiento" prescrito el esclavo "verá de forma amable y agradecida al hombre blanco cuyo poder compulsivo... le ha permitido recuperar sus sentidos y disipar la niebla que obnubilaba su intelecto.