El acceso al Soto Playa se realiza a través de dos pasarelas que lo conectan, la primera con paseo del Postiguillo, paralelo al río por la margen derecha, y recorrido por dos hileras de castaños que le confieren abundante sombra.
En su entorno, además del baño puede practicarse la pesca con caña o retel, hay lugares habilitados para el pícnic con mesas de madera y zona de columpios para niños.
También adosado al mismo conjunto se encuentra el lavadero, rehabilitado recientemente, y el bar-terraza Soto Playa.
Hasta finales del siglo XIX, las Eras de Santa Bárbara eran el lugar celebración del Lunes de Bailas, romería en la que se veneraba a Santa Bárbara, acudiendo al entorno de la ermita a merendar y bailar.
La feforma de las fiestas de 1914 dice: «La fiesta de la Bailas, tan divertida en tiempos y ahora tan decaída, se efectuará en la tarde del lunes en la Alameda de Cervantes y en la noche en este paseo tendrá lugar la segunda verbena con cuyo festejo terminarán las fiestas»[1] pero poco antes se había procedido a la recuperación de la romería a San Polo que es la que actualmente se celebra en la pradera junto al Duero.