Le siguió el Bloque Al-Ahrar, de Dia al-Asadi, con 34 escaños, formando una coalición en la que Nuri al Maliki fue reelegido en su cargo.
Al igual que en las elecciones de 2010, se reservaron 8 escaños para las minorías étnicas y religiosas.
Esto redujo el incentivo para que los partidos formen amplias coaliciones antes de la elección.
[4] Los árabes chiitas se dividieron entre la Coalición del Estado de Derecho del Primer Ministro, el sadrista Bloque Al-Ahrar, y el Consejo Supremo Islámico de Irak respaldado por la coalición al-Muwatin.
El grupo insurgente Estado Islámico de Irak y Siria ha amenazado con violencias contra musulmanes sunitas que votan en las elecciones.