En Salamanca, donde era profesor, fundó y dirigió en 1891 La Libertad.
[1] Poco después fundó también el diario La Democracia.
Fue luego catedrático de lengua y literatura griegas de la universidad Central desde 1898 hasta 1913, época en la que amistó también con Marcelino Menéndez Pelayo.
Tradujo a prosistas griegos, entre ellos Jenofonte (Helénicas), y además la Historia de la Literatura Griega Clásica de Gilbert Murray (Madrid, La España Moderna, 1899) y la Gramática Griega de Georg Curtius (Madrid, Ricardo Fe, 1887), entre otras obras.
Tuvo como discípulos a Agustín Millares Carlo y a Emeterio Mazorriaga; este último le sucedió en la cátedra.