En París, ingresó en la Academia Colarossi a un curso especial con Emile Othon Friesz y luego asistió al taller de André Lhote (con quienes también estudiaron Raquel Forner, Lino Enea Spilimbergo, Horacio Butler y Antonio Berni entre otros).
Allí también conoció personalmente al Henri Matisse y Raoul Dufy, de quienes recibió una gran influencia.
Ese mismo año regresó a Francia y expuso en el Salón de París.
La obra que ocasionó la clausura de la muestra fue Bañistas, la cual fue considerada inmoral por las autoridades y se solicitó su retiro.
Durante la década del cuarenta en su taller se reunían periódicamente grandes personalidades de la cultura y el arte argentino, como: Deodoro Roca, Saúl Alejandro Taborda, María Luisa Cresta de Leguizamón; también Rafael Alberti, León Felipe, Lino Enea Spilimbergo y Antonio Berni.
Su obra en esa etapa se encuentra en diálogo con el grupo MADÍ y las tendencias modernas de Buenos Aires.
En 1954 forma parte del grupo "Creación", conformado también por Marcelo Bonevardi, Diego Cuquejo, Raúl Pecker, Pedro Pont Vergés y Roberto Viola.