Escuela del Hogar y Profesional de la Mujer

Así seguían la corriente europea de las enseñanzas menagéres, impartidas en instituciones para preparar a las futuras amas de casa en economía, higiene y tareas domésticas en Suiza, Francia o Bélgica.

[4]​ Con la llegada de la Segunda República se hizo una nueva reforma encomendada a María Luisa Navarro Margati,.

Elena Fortún publicó un artículo en la revista Crónica en que describía este nuevo uso de sus instalaciones, alabando a profesoras y alumnas.

Eran Economía doméstica, Corte y confección, Lavado, Plancha, Puericultura e Higiene.

Además se impartía Religión, Nacional Sindicalismo e Historia de España.

Un año después se trasladó a un hotel del Paseo de la Castellana el número 60, luego 72.