En la mitología griega, Eurimedonte (Εὐρυμέδων / Eurymédōn) es el rey de los gigantes.
Es un personaje puramente homérico que aparece prominentemente en la Odisea como el antepasado de los feacios.
[1][2] Más adelante el autor vincula a los feacios, cíclopes y gigantes en una misma estirpe común, venerada en el pasado con hecatombes gloriosas, y que incluso banqueteaban al lado de los dioses.
[8] En una versión minoritaria se dice que Eurimedonte violó a Hera cuando ésta era una niña y engendró a Prometeo, lo que causó la furia de Zeus, quien lo fulminó con sus rayos y lo lanzó al Tártaro.
[10] Por otro lado podemos encontramos un paralelo de Eurimedonte en la figura del Japetónida Menecio; también llamado soberbio y que se causó su propia ruina.