Tras aprender el oficio con su padre, viajó a París, donde entró a trabajar en el Bristol, al que siguieron el Restaurant Foyot y el Royal, este último en Évian-les-Bains.
[1] En 1923 compró el restaurante Guieu en Vienne, que reconvirtió en La Pyramide, donde desarrolló su labor hasta su fallecimiento.
Entre ambos consiguieron llevar al restaurante a las más altas cotas de excelencia.
También concedió gran importancia a la decoración, la vajilla y demás aspectos secundarios de la restauración.
[1] Entre sus discípulos se encuentran Paul Bocuse, los hermanos Troisgros y Alain Chapel.