Formación reactiva

Se manifiesta como comportamiento, actitud o hábito que marcha en la dirección opuesta a la de un deseo reprimido.

Freud sostiene que esta representación se sustituye por un "síntoma primario de defensa", también denominado, "contrasíntoma".

Se trataría entonces de una "defensa exitosa", en la justa medida en que los componentes que intervienen en el conflicto, tanto la representación sexual como el censurado "reproche" (el afecto asociado a la representación), han sido globalmente segregados de la conciencia en beneficio de actitudes o conductas que representen virtudes morales extremas.

Lo antedicho no significa necesariamente que las formaciones reactivas solo están adscriptas a la neurosis obsesiva.

Se encuentran también en la histeria, pero en estos casos, no tienden a constituirse en armazones de carácter.