Sebastián de Totanés

Después viaja a Toledo, donde cursa estudios superiores.

Marcha a Cádiz y se embarca en el navío Virgen de Atocha hasta llegar a tierras mexicanas.

A su llegada le nombran Comisario de la tercera Orden.

A los 56 años es elegido procurador en las Cortes que se celebrarían en Madrid y Roma.

Fue un gran teólogo, querido y apreciado por todos, especialmente donde impartía sus enseñanzas.