[1] Comensoli nació en Bienno, por entonces Reino de Lombardia-Venecia, siendo la quinta de diez hijos del matrimonio conformado por Carlo Comensoli y Anna Maria Milesi.
[2] Mediante la oración asidua, la mortificación, una intensa vida interior y la práctica de las obras de caridad, Comensoli se preparó para la vida religiosa.
Comensoli y sus hermanas, asesoradas por el obispo de Bérgamo, Camillo Guindani, tuvieron que abandonar su primer emplazamiento y se refugiaron en Lodi.
El obispo de Lodi les dio la bienvenida y les cedió una casa en Lavagna, que temporalmente se convirtió en la Casa Madre del Instituto.
Quienes la habían conocido, especialmente los pobres y los humildes comenzaron a describirla como "santa".
El caso, tras el proceso diocesano, fue sometido a la Congregación para las Causas de los Santos que promulgó el decreto sobre el milagro, declarando la inexplicabilidad de la curación rápida, completa y duradera.