Este gobierno se caracterizó, por un lado, por la continuidad de las políticas establecidas por el gobierno anterior del Frente Amplio y, por el otro, por reformas sociales (entre las cuales se hallan la legalización y regularización del mercado de la marihuana, matrimonio homosexual y legalización del aborto) entre otras novedades.
[1][2] La segunda vuelta tuvo lugar el 29 de noviembre entre los partidos Frente Amplio y Nacional.
Resultó ganador el Frente Amplio con el 54,63% de los votos válidos contra el 45,37% del Partido Nacional.
Sin embargo esta no fue seguida estrictamente por el gobierno de Mujica en cuanto a las políticas implementadas.
Estas autoras también señalan que fueron dos las inacciones en política educativa que omitieron abordarse a pesar de su importancia estratégica: la no reforma de la educación media y la no reforma del estatuto del personal docente.
[5] Desde su creación formal por ley y durante el período de gobierno de José Mujica la universidad recibió su primer asignación presupuestal, se eligió a un Consejo Directivo Central provisorio, integrado por Pablo Chilibroste, María Antonia Grompone y Rodolfo Silveira,[6] y comenzó a diseñar las primeras carreras terciarias.
Con esta obra se pretendía obtener beneficios brutos para UTE de aproximadamente mil millones de dólares, 150 millones para ANCAP y la población vería reducido el costo del gas natural.
Además, se posibilitó la venta de marihuana estatal en farmacias, en donde los usuarios podrán comprar hasta 40 gramos mensuales.
Terminado este plazo sin cambiar de opinión, se procede a realizar esta intervención.
Esto viene consigo con un plan que promovió el uso de medios anticonceptivos para evitar embarazos no deseados.
[24] Desde que llegaron a Uruguay se les otorgó residencia permanente y se les proveyó alojamiento, servicios de traductor, acceso a la salud, inserción educativa y laboral, además de percibir una pensión mensual variable según la cantidad de hijos menores.
[24] Siete años después, en 2022, de las cinco familias refugiadas cuatro se quedaron en el país y una abandonó Uruguay.
Pero otros aspectos de carácter político presentes en el proyecto considerados inconvenientes por Uruguay llevaron a su abstención.
[31] El servicio con mayor cantidad de frecuencias diarias cubierto por PLUNA, era el Puente aéreo Montevideo-Buenos Aires.