Gonzalo de Celada (¿?-1443) fue un eclesiástico español, miembro de la corte de Juan II de Castilla.
Perteneció a la orden franciscana y fue nombrado obispo titular de Calcedonia (Episcopus Chalcedonen.)
El 24 de febrero de 1434 fue el encargado de consagrar la recién construida capilla del Alcázar de Madrid.
[3] Tuvo como cubiculario a Pedro González, prior del Santo Sepulcro en Toro.
El 7 de agosto de 1443, en Siena, este último pedía a la Santa Sede (entonces ocupada por Eugenio IV) la sucesión en los bienes de Gonzalo de Celada, que le fue concedida.