[6] Hasta el siglo XIV no se empezó a difundir por el resto de países.
Especial acierto en los esmaltes desarrollando los vidriados a la sal, para dotarlos de una mayor impermeabilidad.
En Inglaterra tuvo gran arraigo y a partir del siglo XVII se desarrolló una industria autónoma en Staffordshire.
Las materias fundentes son principalmente feldespatos y feldespatoides que en la fase de cocción forman fases vítreas que actúan de ligantes entre las partículas y reducen la porosidad final del producto.
Se emplea sobre todo para suelos expuestos a grandes cambios de temperatura o al agua.