Está ampliamente distribuida en la naturaleza, de forma que se puede encontrar en el ambiente (tanto suelos como aguas),[3] en animales y en la microbiota intestinal humana.
Además, se la considera un patógeno oportunista, por lo que en algunos casos es causante de diversas infecciones tanto en animales como en humanos.
Por otro lado, suele encontrarse en alimentos, sobre todo productos lácteos y cárnicos, ya que desempeña un papel importante en su maduración.
También se ha encontrado en heces de personas con diarrea,[2]sin embargo, ha sido en estudios antiguos cuya precisión diagnóstica era limitada, de modo que no está del todo claro que esta bacteria pueda ser causante de la enfermedad y en muchos casos pueden haber sido otras las especies bacterianas involucradas.
[27] En la mayoría de estudios realizados resulta ser resistente a los antibióticos: ampicilina, cefalotina, cefoxitina, cefuroxima, penicilina, piperacilina, amoxicilina-clavulánico, piperacicina-tazobactam.
En cambio, es sensible a amikacina, cefotaxima, cefepime, ceftazidima, ceftriaxona, ciprofloxacino, gentamicina, imipenem, meropenem, quinolonas y trimetoprim-sulfametoxazol.
[28][29][30] Aun así, algunas cepas pueden mostrar variabilidad, como por ejemplo ser resistentes a carbapenémicos.
[54][55] A raíz de estos y otros estudios, la cepa HA4597 se ha clasificado como probiótico.