Cuenta entre sus haplogrupos derivados a A, S, I, W, X, Y, R* y varios subgrupos de N. N se habría originado en algún punto de la ruta migratoria costera del Sur de Asia hace unos 65.000 años y está definido por los marcadores genéticos 8701, 9540, 10398, 10873 y 15301.
Comparte con el haplogrupo M similitudes o paralelismo en su origen y en el proceso migratorio.
M y N son clados próximos derivados del haplogrupo L3, por lo que están estrechamente relacionados con la expansión de la humanidad fuera de África.
[2] En la medida de sus frecuencias, N es considerado un haplogrupo euroasiático-occidental con su centro más importante de expansión en el Cercano Oriente,[3] sin embargo se extiende también desde sus orígenes hacia el Sudeste de Asia, Asia Oriental y las regiones más remotas como Australia, Siberia y finalmente América.
A través del macrohaplogrupo R* alcanza en Europa las más altas frecuencias y gran difusión en los demás continentes.