Algunos nombres vinculados a estos tiempos son los de Cadavieco, Estrada, González, Menchaca, Orbón, Pardo, Prendes, Quirós o Sordo.
La década de 1910 comenzó para el Sporting con un acontecimiento clave: el Gijón Sport Club y la Juventud Sportiva Gijonesa acordaron su fusión, separándose muy poco tiempo después, lo que hizo declinar a dichas sociedades, cediendo paulatinamente al Sporting la hegemonía futbolística de la ciudad.
En 1912, se celebró un enfrentamiento triangular entre los equipos de la ciudad ya mencionados: el Real Sporting, el Gijón Sport y la Sportiva Gijonesa.
El Real Sporting resultó vencedor, en 1916, del Campeonato Regional de Asturias, ya definitivamente regulado y consolidado.
Los jugadores de la Sportiva habían ido dejado paulatinamente la entidad para integrarse en el Sporting, que se consolidó definitivamente como líder indiscutible del fútbol local.
Su trayectoria en la entidad gijonesa, en cualquier caso, duró poco, siendo fulminantemente destituido tras hacer unas desafortunadas declaraciones a un diario centroamericano.
La plantilla de aquel equipo la forman Morán, Armandón, Picú, Prida, Menéndez, Quirós, Candasu, Castro, Luisón, Chus, Domingo, Campanal, Arcadio, Morós, Pachón, Campomanes, Amadeo Meana, Antuña y Valeriano; reforzados con la llegada de Sion, Elicio, Cayetano, Noreña, Moro, Canteli, Vicente, Palacio, Focaya, Leiva y Fernández.
A partir de ese momento, y durante casi cuarenta años, el nombre del equipo fue Real Gijón, aunque continuó siendo conocido popularmente como Sporting.
Aquella histórica plantilla estuvo integrada por: Lerín, Ceballos, Sion, Tamayo, Tamargo, Cervigón, Dindurra, Gundemaro, Adolfo, Domingo y Liz.
El Molinón comenzó a quedarse pequeño ante la avalancha de aficionados que acudían al campo, especialmente en los partidos ante el Real Oviedo.
A su fallecimiento, se depositó una corona con los colores rojiblancos ante el busto que le fue erigido en la capital asturiana.
La Federación Española no le dio la razón y obligó al equipo a ganarse la permanencia en la categoría en un torneo organizado en Palma de Mallorca.
Al año siguiente, volvió a repetirse la misma historia: el Real Gijón finalizó 13.º, pero esta vez no fue necesario jugar la promoción al renunciar el San Sebastián a la plaza que le correspondía como consecuencia del descenso de su primer equipo, la Real Sociedad.
En la temporada 1966-67 el jugador Solabarrieta finalizó como máximo goleador, con veinticuatro tantos, de los cuales marcó dos al Real Oviedo en El Molinón en un partido que ganaron los gijoneses por cinco a cuatro.
Quini acabó aquel año como máximo goleador de Segunda División, con veinticuatro goles, y no tardó mucho en acompañar a Churruca, que se convirtió en el tercer internacional absoluto en la historia del equipo.
Durante aquellos años en Primera el equipo desplegaba un buen juego, evidente por los trofeos al máximo goleador logrados por Quini en las campañas 1973-74 y 1975-76, que no se vio reflejado en la tabla, en la que no salió de los últimos puestos, viéndose abocado a esperar hasta las últimas jornadas para certificar la permanencia.
Esta vez, sin embargo, solo se mantuvo un año, con el club saneado económicamente y prometedores jugadores jóvenes.
La plantilla de aquel año estuvo formada por Castro, Rivero, Claudio, Redondo, José Manuel, Doria, González, Núñez, Maceda, Cundi, Javi, Killer, Joaquín, Abel, Ciriaco, Valdés, Mesa, Andrés, Uría, Urbano, Juan, Quini, Morán, Fanjul, Sergio, Ferrero, Toni y Colás.
La temporada 1977-78 la volvió a disputar, así, el Real Gijón en Primera División; ocho jornadas imbatidos nada más comenzar dejaron claro, ya desde el principio, que el equipo gijonés se había convertido en un serio aspirante al título.
La siguiente temporada, Quini volvió a ser el mayor anotador de Primera y el Real Gijón finalizó 3.º en la tabla.
En la Copa de la UEFA, el sorteo volvió a deparar un rival difícil para el equipo: el PSV Eindhoven; y, en la Copa del Rey, se alcanzaron las semifinales, no pudiéndose doblegar al Castilla C. F., entonces líder de Segunda, tras haber derrotado al Club Deportivo Turón, C. D. Colonia Moscardó, Real Zaragoza, Valencia C. F. y Rayo Vallecano.
1982 fue también el año del mundial de fútbol, en el que el Sporting estuvo representado en la selección española con Joaquín, Maceda y Jiménez.
Ambos llegaron a ser internacionales con la selección española y Ablanedo obtuvo el Trofeo Zamora al portero menos goleado en tres ocasiones.
En la 1986-87 también se dieron dos acontecimientos históricos para el club: se venció al Barcelona en el Camp Nou por cero a cuatro, lo que supuso la mayor victoria a domicilio del Sporting en Liga, con un equipo que formó con la siguiente alineación: Ablanedo II, Tati, Ablanedo I, Jiménez, Cundi, Marcelino, Joaquín, Mesa (Jaime), Esteban, Flores (Luismi) y Eloy.
Asimismo, recalaron en el equipo Ígor Lediakhov, procedente del F. C. Spartak de Moscú, y Marcos Vales.
Como sportinguista volvió a ser internacional absoluto y tomó parte en la Eurocopa 1996, convirtiéndose en el último rojiblanco en vestir la camiseta de España hasta la fecha.
El descenso a Segunda División comenzó a verse como algo inminente y terminó por producirse en la temporada 1997-98, tras una campaña desastrosa en la que se baten varios récords negativos de la historia de la Liga: el equipo fue relegado con solo trece puntos, no habiendo conseguido más que dos victorias y siete empates en una temporada en la que se sucedieron en el banquillo gijonés tres entrenadores: Antonio Maceda, José Manuel Díaz Novoa y José Antonio Redondo.
Fue un curso marcado por la irregularidad, con varias derrotas abultadas y solo un empate en toda la temporada, aunque el Sporting logró la permanencia en la categoría en el último partido, disputado en El Molinón contra el R. C. Recreativo de Huelva, al que venció por dos goles a uno.
En la Copa del Rey se alcanzó la mejor cota desde la temporada 1994-95, los cuartos de final, donde los rojiblancos cayeron eliminados ante el Athletic Club.
La campaña 2010-11 concluyó como la mejor del Sporting desde su retorno a Primera División, finalizando la competición en décimo puesto.