Se construyó también la torre rectangular a los pies de la nave añadida y un coro alto.
La chambrana se decora con puntas de diamantes y la arquivolta exterior con bolas helicoidales.
Los canecillos que decoran la cornisa están labrados con cabezas zoomorfas, piñas y otras tallas muy comunes en toda la zona geográfica.
[3] En el muro sur se abre la portada que corresponde a la primitiva nave.
A juzgar por las características de todos estos restos románicos, aunque se muestren bastante maltrechos se puede datar la primitiva obra de finales del siglo XII o comienzos del siglo XIII.