Inyección intracitoplasmática de espermatozoides

Consecuentemente la distinción entre las espermátidas redondas y otros tipos de células redondas, tales los glóbulos blancos (leucocitos), así que la distinción entre espermátidas  vivas y muertas, no son tareas fáciles.

[4]​ Basado en la evaluación de los niños nacidos, ningunas anomalías atribuibles a la técnica ROSI han sido identificadas.

Estas muestras se llaman valiosas porque se dispone de una cantidad limitada sin posibilidad de obtener más, por lo que hay que optimizar su uso y evitar descongelar la muestra completa.

Estos síndromes son enfermedades muy raras, pero parece a ver cierto aumento de su incidencia entre la población nacida por ICSI, aunque sigue siendo muy poco frecuente.

Cuando los óvulos hayan alcanzado el tamaño deseado será recogidos en una punción ovárica.

El estoque se introduce en la vagina, atraviesa la pared del fondo vaginal en dirección al ovario y se pincha para aspirar los ovocitos gracias a un sistema de aspiración de vacío.

Un tubo flexible, conectado también al sistema anterior, permite la recuperación del fluido folicular dirigiéndolo a un vial con medio HEPES.

Pasadas las 36 horas, el ginecólogo procederá a la aspiración de los ovocitos, anestesiando localmente o sedando previamente a la paciente para evitar que sufra dolor durante el proceso.

Todas estas técnicas finalmente derivan en un ICSI, solo son distintas aproximaciones para la selección del espermatozoide que se inyectará.

Estos pasan por unas columnas magnéticas, de modo que quedan atrapadoslos espermatozoides proapoptóticos.

Es muy importante no proceder a la decumulación antes de que transcurra este tiempo tras la punción.

La técnica de ICSI implica básicamente un microscopio invertido, micromanipuladores, microinyectores y una mesa antivibratoria: La placa en la que se realizará la ICSI estará cubierta de aceite mineral para mantener la osmolaridad y temperatura del medio (aunque la placa estará además colocada sobre una superficie calefactora del microscopio).

La aspiración consiste en succionar con la pipeta haciendo entrar la membrana y parte del citoplasma en ella.

Al romperse la membrana puede entrar un poco de citoplasma que se reintroduciría en la célula.

El stirring consiste en volver a realizar otra punción, unas micras por debajo del primer punto de entrada hasta conseguir romper la membrana.

Una vez los óvulos han sido fecundados mediante la técnica de ICSI, estos son cultivados en medios óptimos para facilitar la evolución del embrión y su división celular.

[7]​ La fecundación anómala más frecuente tras ICSI es la no extrusión y posterior descondensación del segundo corpúsculo, que se manifiesta en la aparición de 1 corpúsculo polar y 3 pronúcleos 15-20 horas tras la fecundación.

Esta técnica es indolora y no requiere ningún tipo de anestesia.

Existen diferentes tipos de catéteres; por ejemplo, las cánulas rígidas se usan para atravesar el cérvix cuando está cerrado (apertura del cuello uterino en una posición más estrecha).

Será necesario esperar al menos 10-12 días para hacer un test de gestación y no correr el riesgo de que sea un falso positivo o un falso negativo.

Es muy infrecuente que ninguno de los ovocitos de la paciente llegue a ser fecundado por ICSI (la probabilidad es menor al 1%), y realmente no se conoce con exactitud a que se debe este fallo.

Es decir, nos encontramos ante posibles fallos en la secuencia de acontecimientos posteriores al ICSI; a que se produzca la expulsión del espermatozoide fuera del ovocito; a que los ovocitos sean citoplasmáticamente inmaduros e incapaces de responder a la activación del espermatozoides o por el contrario sean hipermaduros, y por tanto incapaces de iniciar las oscilaciones del ion calcio necesarios; o a que los espermatozoides presenten defectos o ausencia de la proteína oscilina, que inicia la liberación de dicho ion, entre otras posibilidades.

-Presencia de vacuolas: las vacuolas son normalmente de forma circular y pequeñas, se ven más profundas y con aspecto más similar al espacio perivitelino que al citoplasma.

Por otro lado, también podemos encontrar alteraciones extracitoplasmáticas, es decir, aquellas que tienen lugar en el espacio perivitelino u oolema.

También nos podemos encontrar el corpúsculo polar fragmentado, lo cual no supone ningún problema y se podría microinyectar.

Estos defectos unidos al posible daño mecánico o bioquímico que puede producirse durante el proceso a causa de las pipetas y el PVP podrían ser causa de defectos genéticos, aunque aún no hay estudios que lo demuestren.

[8]​ En relación con las alteraciones epigenéticas, un estudio publicado en 2018 reciente sugiere que algunas técnicas de reproducción asistida, como ICSI induce cambios epigenéticos en la placenta, lo que podría alterar el correcto desarrollo embrionario.

Un oocito es inyectado mediante ICSI.