Durante la Guerra Civil Española se incorporó a las Brigadas Internacionales que combatían contra el fascismo y en defensa de la legalidad republicana.
Cuando estaba siendo trasladado a los Balcanes, su buque fue torpedeado y sobrevivió al naufragio.
Herido varias veces, gaseado un mes antes del armisticio, decidió quedarse en el ejército.
Al llegar al mando varias de sus primeras medidas fueron prohibir a los soldados que le dirigieran la palabra si no era por escrito y crear una compañía disciplinaria llamada de los "pioneros".
Su actuación en dicha batalla no fue buena, y tuvo fuertes enfrentamientos con Walter, pensando incluso en presentar su dimisión.
Para ello idea desdoblar a la XIV Brigada Internacional en dos, convirtiéndose entonces él en jefe de una división.
El proyecto no prosperará, y Dumont decide regresar a Francia.
[2] Tras ocupar los alemanes Francia durante la Segunda Guerra Mundial, se unió a la Resistencia, convirtiéndose en uno de los miembros del Comité Militaire National des Francs-Tireurs et Partisans (FTP), teniendo el apodo de "coronel Paul".