Regresó a Berlín y durante años residió en una casa en el número 50 de Kurfürstenstraße, edificio que hoy no existe.
En 1895 acudió a la escuela femenina de dibujo fundada por Curt Herrmann.
En 1904 se casó con Rudolf Klein-Diepold, un crítico e historiador del arte.
También en 1933 fue expulsada, junto con Fanny Remak que huyó a Inglaterra, de la Secesión.
Sobrevivió en el gueto dos años y falleció pocos días antes de lo que hubiera sido su 81 cumpleaños.