Este tipo de salchicha puede encontrarse desde los años 80 en los puestos callejeros austriacos denominados Würstelstände.
En dialecto vienés se les llama "eine Eitrige" ("una purulenta/supurante").
Este tipo de salchichas se puede preparar de múltiples formas: se puede cocer, freír o asar, pero en cualquier caso no se puede someter a un fuego intenso debido al contenido de queso que posee en su interior.
En su lugar originario (Graz) esta salchicha se sirve con salsas de mostaza o rábano; las variantes más modernas emplean kétchup.
En Linz se comen las famosas Kafka, una variante de Bosna en la que la salchicha se reemplaza por una Käsekrainer (una Bosna es un tipo de snack típico de Austria semejante al hot dog, en el que la salchicha se introduce dentro de pan blanco previamente calentado a la parrilla).