Es una de las más destacadas comedias tempranas de Woody Allen como director, guionista y actor principal y el propio Allen la consideró como la película más graciosa que ha hecho.
[2] Es una comedia alocada, en la que los personajes se debaten en discusiones filosóficas en los momentos más inoportunos, mezclando un hilarante espíritu humorístico con reflexiones profundamente existenciales.
Boris completa el entrenamiento militar, incluida una "obra de teatro sobre higiene" sobre condones y enfermedades venéreas.
Durante el permiso, Boris coquetea en la ópera con la bella condesa Alexandrovna, cuyo amante actual ha matado a varios hombres en duelos .
Boskovic muere accidentalmente mientras limpiaba su pistola preparándose para un duelo en defensa de su honor.
Debaten el asunto con un doble lenguaje filosófico y Boris acepta a regañadientes.
Sobre el cuerpo inconsciente, Sonya y Boris debaten la ética de matar a Napoleón.
Por ello, juró no volver a rodar una película fuera de Estados Unidos.
Sin embargo, a partir de 1996 con Everyone Says I Love You , Allen rodó varias películas en el extranjero.
Grushenko muestra ya un claro estilo en la escritura y en la dirección de Woody Allen, dispuesto a dar el gran paso con su siguiente película, la conocida Annie Hall (1977).
Allen pone un especial énfasis en los diálogos, filosóficos, mordaces e inevitablemente cómicos, así como en la comedia física o slapstick y en los siempre presentes homenajes/parodias a sus héroes: en la escena final, Boris Grushenko baila con la muerte, personificada como lo hiciera el cineasta sueco Ingmar Bergman en su aclamado filme El séptimo sello (1957).