Como toda la serie, está impregnada de temáticas populares para el salón del duque.
Entre la serie destacan cuadros como Asalto al coche, La caída, El columpio y Procesión de aldea.
En La cucaña, se representa un asunto de temática popular y campestre arraigado en la iconografía dieciochesca.
En medio del paisaje difuminado es posible distinguir unas casas de labor, y a una multitud arremolinada en torno al palo.
Goya demuestra aquí su capacidad para interpretar este tipo de asuntos.