Land Rover Santana Cazorla

Su producción comenzó en 1982 como evolución del Land Rover Santana Serie III 109 Especial.

[1]​ El elemento diferenciador del Cazorla es el uso de faros cuadrados como novedad respecto a los diseños de las carrocerías mostradas por Land Rover y Santana hasta la fecha.

La caja de cambios incorpora el “overdrive’, un dispositivo que permite duplicar las relaciones circulando con un desarrollo más largo, desahogando el motor en largos trayectos por carretera, alcanzando los 120 km/h.

Esta época representa para Santana Motor la consolidación de la implementación de divergencias respecto a los diseños originales de Land Rover, con el objeto de adaptarse tanto a la normativa automovilística española como a las necesidades del mercado local.

Además, presenta cuatro ventanas alpinas fijas, dos a cada lado, manteniendo así la configuración iniciada en el Land Rover Santana Serie III 109 Especial.